1. |
El huracán
04:07
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La simiente se convirtió en engendros del pasado
Trastocando una por una las palabras que
Sorprendidas se hacen eco de la sed.
Prestan llanto y atención los famélicos de siempre
Voraces y aguerridos por motivos que
ya ni siquiera caben en papel.
Y entre toda la vergüenza que desata el huracán
Nos vemos prisioneros de la caridad
Para anclarnos sobre hierro a la bondad.
Ríe el rico por tradición, se envenena con su hartura
Aún se presta a la desidia y a la sumisión
Pues anhela cielos y motivación.
Y entre toda la vergüenza que desata el huracán
Nos vemos prisioneros de la caridad
Para anclarnos sobre hierro a la bondad.
Y entre toda la vergüenza que desata el huracán
Nos hacemos pequeños ante la obviedad
Convirtiendo los deseos en voracidad.
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2. |
Cambio de rumbo
03:55
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Fieras demasiado suntuosas
Luces que te obligan a virar
Y el cambio de rumbo
Sentencia el indulto para mi.
Quiero desprenderme de este lastre
Quiero resarcirme del error
Es arduo el camino
Y estorban quejidos de oración.
Cuando se decida el escenario
Donde hallar un poco de humildad
Puede que sea tarde y todo acabe ya.
Sigo esperando que la suerte se decante a mi favor.
¿No entiendes el rumbo errado de mi voz?
Cuando los bolsillos queden llenos
Y el azar te invite a apostar
Puede que sea tarde y todo acabe ya.
Sigo esperando que la suerte se decante a mi favor.
Sigo buscando ese gesto malherido por el ego de tus miedos.
¿No entiendes el rumbo errado de mi voz?
Y aparecen siempre los pedazos de
Lo que pudo haber sido y no fue.
Recojo los retales de aquel traje gris que vendí.
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3. |
Sobre Ti
03:51
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Hay pasos perdidos que aceleran los latidos de tu corazón.
Hay causas maltrechas, que de paso tú aprovechas para sonreír.
Nunca fuimos tan austeros, bajo el mismo cielo desbocado que apunta a sobrevivir
Hay caminos breves que se tuercen entre redes solitarias,
Hay residuos vagos que hoy acechan cada lado de tu padecer.
Siempre huiste del consuelo por el mismo necio que escondía su otra identidad.
Siente el peso sobre ti,
no hay refugio entre tanta gente,
antes de que eches a andar, vuelve.
No descuides la ocasión
de ocultar lo que ocurre en tu mente,
salvo agravios, puede ser cuestión de suerte.
La resignación ya no cabe en el rincón del diván
y la desesperación se inmiscuye entre el sabor del adiós.
Siente el peso sobre ti,
no hay refugio entre tanta gente,
antes de que eches a andar, vuelve.
No descuides la ocasión
de ocultar lo que ocurre en tu mente,
salvo agravios, puede ser cuestión de suerte.
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4. |
A mi manera
03:14
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La posesión es sólo preludio del repudio
Si bien nunca exigí exclusividad
Puedo extrañar aquello que no halle
Entre las diferencias naturales
De un sediento de humildad.
Entre el rumor y el tedio estoy,
Recorro el laberinto
Que vuelve a ser distinto
Y cambia a cada paso que doy.
Pude obtener los beneficios del sacrificio
Pero tengo por norma desechar
Lo que no me suponga una quimera
Pues he de hacerlo todo a mi manera
Y no lo puedo remediar.
Entre el clamor y el sueño estoy,
Reniego de espejismos
Sedientos de optimismo
Pues ya enterré hace tiempo lo que soy.
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5. |
Es la hora exquisita
03:37
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Un sosiego, vasto y tierno parecer
Del silencio se propone descender.
Tengo miedo a la fiel casualidad
Que susurre y me confiese algo más de ti.
Miro y se que ya no estás
Retorné a la realidad
Como un lamento embriagador, dulce adicción.
Es la hora exquisita en soledad
Que alimenta mi contemplación.
Y aunque la evidencia sea una cruel fugacidad
sería un buen momento para perecer.
Vuelvo a echar la vista atrás
Se que ya no volverás
Como un lamento embriagador, dulce adicción.
Los segundos se hacen eco del ayer
Cuando me encontré deshabitado
La locura se disfraza de color
A kilómetros de ti.
Vuelvo a echar la vista atrás
Se que ya no volverás
Como un lamento embriagador,
Irresistible seducción.
Como un lamento embriagador…
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6. |
Rencor
02:38
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Las cenizas del incendio
Me hicieron confiar
En la más ruin e insolente ambigüedad.
Vi ambición entre delirios
De grandeza por llegar
A las puertas de la falsa eternidad.
Hoy desprecio los elogios
De la burda ingenuidad
Los que un día estuvieron ya no volverán.
Y no cedo ni una parte
De mi credo singular
El rencor fue siempre mi debilidad.
Hoy desprecio los elogios
De la falsa ingenuidad
Los que un día estuvieron ya no volverán.
Y me estrello contra un muro
Sin más fe que acumular
El rencor fue siempre mi debilidad.
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7. |
La herida
03:25
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Un giro inesperado a la vanguardia
Rupturas desatentas, silencios por ahogar.
Un rostro desquiciado que es indemne
Un grito al desamparo sin piedad.
Un año perpetrado débilmente
Del huracán sin nombre que pierde su lugar
Que pasa y nos convierte en presidiarios
Haciéndonos esclavos de la ambición.
Y mientras miro al frente
los pedazos me impiden descansar.
El cambio es inminente,
La herida quedó abierta,
Supura y no cicatrizó.
A un paso de lanzarnos al vacío
Esquirlas del pecado que no es original
Postrados ante otro advenimiento
Actores de una escena sin guión.
Y mientras miro al frente
los pedazos me impiden descansar.
El cambio es inminente,
La herida quedó abierta,
Supura y no cicatrizó.
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8. |
Apaciguo el gris
03:16
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Apaciguo el gris,
Mientras quemo aliento en mis venas
Mientras dejo escapar el absurdo de las vagas recompensas.
El albor de la noche
Se enmascara de cruel sirena
Se resiste a varar entre tantos vaivenes de la marea.
Empújalo, aunque duela.
Empújalo, aunque el insomnio te venza
Y los músculos se entumezcan, empújalo.
Apaciguo el gris,
Mientras quemo aliento en mis venas
Mientras dejo escapar el absurdo de las vagas recompensas.
Tanto tiempo esperado,
Tantos años desordenados
Quieren ya deshacerse entre el humo intangible de este cigarro.
Empújalo, aunque duela.
Empújalo, aunque el insomnio te venza
Y los músculos se entumezcan, empújalo.
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9. |
Escombros
03:28
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Se que todo este tiempo me alejé
Buscando entre los libros la verdad,
Restándole atención a lo mundano.
Se que me mantuve al margen, que viajé,
seguí la dirección del huracán
Absorto en la agonía del insomnio.
Después de la tormenta
Que dejó todo en tinieblas
La calma que se espera se hizo esperar…
Escombros de ayer
Vestigios y ruinas posadas ante mi
Fijadas en el tiempo,
Y hoy solo quedarán…
Se que aunque no pueda rectificar
Las cicatrices siempre pueden ser
Aliadas en la afrenta de la vida.
Después de la tormenta
Que dejó todo en tinieblas
La calma que se espera se hizo esperar y esperar…
Escombros de ayer
Vestigios y ruinas posadas ante mi
Fijadas en el tiempo,
Y hoy solo quedarán…
Escombros.
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10. |
Un combate a muerte
02:50
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Quizás más fuerte,
Quizás más frío,
Quizás cerrado en banda.
Quizás hundido
Y malherido
Por miedos bien fundados.
Quizás cansado
de persuadir
Lo que siempre me enseñaron.
Quizás hambriento
de algo de aliento,
Quizás cerrado en banda.
Olvidaré este año que se fue
De mis puños apretados como piedras
Fue un combate a muerte, a muerte!
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11. |
Vámonos
04:04
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Las horas bajo palio, cosidas con sudor,
el viento que embelesa la ocasión,
y tu cuerpo ya se funde
con la arena del derrumbe que se desató.
Diviso el horizonte, a kilómetros de aquí,
reflejos que parecen bendecir,
los cantos de sirena
que penetran en tus venas como un huracán.
Vámonos, aquí no hay lugar para dos.
Vámonos, donde el viento sople a favor
y el salitre del mar se adhiera en tu piel
tatuando los viejos deseos,
y podamos brindar por los años que están por llegar.
Recojo algunas piedras, me siento a dibujar,
las sombras arrojadas del coral,
y las olas se divierten
con las curvas de tu vientre cubierto de sal.
Vámonos, aquí no hay lugar para dos.
Vámonos, donde el viento sople a favor
y el salitre del mar se adhiera en tu piel
tatuando los viejos deseos,
y podamos brindar por los años que están por llegar.
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